sábado, 27 de octubre de 2007

Variaciones de Cortázar

El Fin de un Amor.
Gemidos rompieron el silencio en la cabaña, era el termino de un placer por unos momentos, tenían como amantes un corto tiempo, Ricardo le recuerda a alma que debía volver con Ernesto su marido, no debían leverntar sospechas y así poder continuar con su amorío, pero Alma esta cansada de vivir a escondidas, y le propone a su amante un plan para deshacerse de Ernesto, por lo que lo planearon toda la noche entre pasión y locura.
La semana siguiente, Alma debería ir a Monterrey por lo que se ausentaría de la capital pero en su lugar de ir, se encontraría con Ricardo en la cabaña, que se encuentra cerca de su casa y así llevar acabo el plan.
--Ricardo espera aquí en la cabaña, yo quiero ver como muere ese maldito de Ernesto, no vayas a salir, yo volveré en la noche--, le decía Alma antes de ir en busca de su destino.
Llego por la puerta trasera de su casa, sus perros no ladraron, la servidumbre salio, debería estar únicamente su marido, debería estar en la biblioteca en el sillón verde, leyendo sus libros favoritos, al llegar ahí, con mucho cuidado de no hacer ruido, salto ante el sillón para sorprenderlo, pero no estaba, por lo que supuso que se encontraba en la alcoba, y llego al cuarto sin que se diera cuenta de su presencia, hubiera deseado ver su cara, pero se encontraba en la cama cubierto por las sabanas, solamente descargo la pistola, del baño salio apresurado su esposo, Ernesto y, al ver a su mujer con la pistola, alarmado destapo al cuerpo que yacía muerto en la cama, era una mujer, la amante de Ernesto.
Estamos solos,--le dijo--, acabo de matar al marido de ella en la cabaña, creo que con dos divorcios hubiera sido más fácil para todos nosotros.

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